Tras la revisión inicial del proyecto por parte del director de obra, Román Quintero, vio algunas deficiencias en los cálculos de la cimentación, por lo que tras varias reuniones técnicas se decidió hacer un estudio geotécnico de la zona más cercana a la carretera A-5000 y se concluyó que la cimentación se debe reforzar mediante hincado de palos de eucaliptos de entre 4 y 6 metros.
Todos estos estudios han llevado varias semanas de trabajo. Al no poderse hacer la cimentación, la obra se ha tenido que detener, mientras se buscaba la solución técnica más idónea para que la avenida no vuelva a tener problemas de estabilidad y hundimientos.
Las directrices que el concejal de urbanismo, Tomás Domínguez, ha dado al director de obra es que prime la calidad y durabilidad de la obra ante cualquier otro criterio técnico, social o económico.